La empresa Eco Fadrin de Murieta, que recicla telas, está a punto de cerrar, según publica Diario de Noticias de Pamplona. "Comenzó hace seis años como un sueño que en poco tiempo se convirtió en dos naves llenas hasta los topes de telas para reciclar. Al frente del negocio estaba Joaquín Sanz Arizaleta, quien hoy nada más abrir la puerta de su empresa dice "mira, esto es lo que queda de mi negocio, pobrecico". Y es que de aquellos kilos y kilos de retales ahora queda algún montón, pero tan sólo como una imagen testimonial".
"Como en otras tantas empresas, ha sido la crisis económica la que está llevando a Joaquín Sanz Arizaleta a echar el cerrojo de Eco Fadrin. Además, según explica, el fin de su negocio tendrá consecuencias medioambientales porque a partir de ahora los 35.000 kilos de tela que reciclaba cada año en sus naves de Murieta acabarán enterrados o quemados. "No hay otra empresa como la mía en todo el norte de la península y si cierro, muchas industrias tendrán un problema con los desechos y acabarán eliminándolos a su manera o irán directamente a los vertederos donde quedarán enterrados".
"La actividad de Sanz consiste en recoger restos de telas y recuperarlos. Para ello hay dos opciones. "Los que son de más calidad acaban siendo hilo para costura y los restos que no sirven para esto se trituran y se convierten en borra, que es el material con el que se hacen, por ejemplo, las bandejas de los coches. De esta forma se reutiliza la tela", añade.
